El Abierto Mexicano de Tenis (AMT), que se llevará a cabo del 24 de febrero al 1 de marzo en Acapulco, es mucho más que un evento deportivo; es una celebración que une a nuestra comunidad y fortalece nuestra identidad. Desde su traslado a Acapulco en 2001, el AMT ha evolucionado, atrayendo a figuras destacadas del tenis mundial y consolidándose como uno de los torneos más prestigiosos de América Latina. Este crecimiento ha traído consigo beneficios significativos para nuestra ciudad.

La lucha libre en Acapulco no es solo un espectáculo, es una tradición arraigada en el corazón de nuestra comunidad. A lo largo de los años, hemos visto cómo esta disciplina ha evolucionado, enfrentando retos y encontrando nuevas formas de seguir brillando. Desde la legendaria Arena Coliseo, inaugurada en 1953 y testigo de épicas batallas con figuras como El Santo y Blue Demon, hasta las nuevas generaciones que hoy buscan un lugar en la historia, la lucha libre ha sido símbolo de identidad y resistencia para Acapulco.

Este fin de semana tuve la oportunidad de visitar la Feria Divermóvil, ubicada en el Hotel Amares, justo frente a la playa ¡y déjenme decirles que fue increíble! Desde el momento en que llegué, el ambiente festivo, lleno de risas, luces y música, me transportó a esos días de infancia donde la diversión no tenía límites.

Este año, la magia regresa con más fuerza que nunca. Si algo caracteriza a Acapulco es su capacidad de levantarse y brillar, y este 31 de diciembre no fue la excepción. Recuerdo cómo, hace apenas un año, no tuvimos la tradicional Gala de Pirotecnia. El dolor por el paso del huracán Otis seguía fresco, pero hoy las cosas son distintas.